Depresión Infantil

DEPRESIÓN INFANTIL

 

¿QUÉ ES?

  • Tristeza intensa y duradera que interfiere en las capacidades y desarrollo del niño.

 

  • Depresión mayor: cuando los síntomas duran más de 2 semanas.

 

  • Trastorno distímico: cuando los síntomas pasan de 1 mes.

 

¿CÚANDO APARECE?

La depresión infantil  puede surgir a causa de "cambios importantes y estrés" como resultado de la pérdida de los padres, un divorcio, problemas familiares, etc. Aproximadamente, el 5 por ciento de los niños padecen de depresión en algún momento. Los niños que viven con mucha tensión, que han experimentado una pérdida familiar o que tienen desórdenes de la atención o de la conducta, o presentan dificultades en el aprendizaje o problemas de salud mental, corren mayor riesgo de sufrir depresión. Por lo tanto, los niños con trastornos del desarrollo son un grupo de riesgo importante frente a la depresión infantil.

 

  SÍNTOMAS

Cada niño es único en su forma de ser, en su personalidad y en la manera de aceptar los cambios que se ocasionan en su vida. Para llegar a pensar  que un niño tiene depresión, es preciso conocer muy bien al niño y saber qué es realmente normal en su comportamiento y forma de ser. Es conveniente que padres, familiares y profesores estén atentos cuando algún niño muestra alguna de las siguientes características:

  • Está continuamente triste, llorando con más facilidad.
  • Perdida del interés por los juegos preferidos y por la escuela. 
  • Alejamiento de sus amigos y de la familia.
  • Comunicación pobre.
  • Se aburre y se cansa con facilidad.
  • Presenta menos energía o concentración.
  • Está irritable o demasiado sensible frente a pequeñas frustraciones, montando rabietas o berrinches con más facilidad. 
  • Expresa baja autoestima, despreciándose a sí mismo. 
  • Elige "finales tristes" para sus cuentos y representaciones. 
  • Comportamiento agresivo
  • Se queja constantemente de dolores tales como de cabeza o de estómago.
  • Duerme demasiado o muy poco.
  • Come demasiado o muy poco
  • Sufre una regresión, hablando como un bebé u orinándose en la cama. 
  • Habla de suicidio. 
  • Habla de escaparse de casa

TRATAMIENTO PSICOLÓGICO

 El tratamiento de la depresión infantil se adapta a cada caso en particular y a la fase del desarrollo en la que se encuentra el niño y en base a su: funcionamiento cognitivo, su maduración social y su capacidad de mantener la atención. Se utiliza un lenguaje que puedan entender los ninos, se les ayuda a conocer sus emociones y sus pensamientos para que les resulte más fácil exteriorizarlos y hablar de ello, mediante estrategias y actividades lúdicas.

Se implica a la familia además de hacer intervenciones en su entorno social y escolar.